La primera navidad con tu bebé es un sueño hecho realidad, pensar en la ilusión que significa vivir esta época mágica con tu pequeñito (a) es fascinante. Sin embargo, cuando llega el momento, estás en el post parto y notas lo frágil que es aún tu bebé, aunado a la falta de práctica y experiencia si son padres primerizos, puede convertir el encanto de las fiestas en todo un reto.
Este es el motivo del artículo a continuación, realizado para la revista y programa de televisión la Aventura de Ser Mamá y Papá en Diciembre 2016.
Viviendo las festividades en el postparto.
La Navidad y el Año Nuevo son una época mágica que se suele disfrutar con amistades y familiares a quienes a veces no se ve el resto del año, por lo que estas fechas se convierten en un buen momento para reunirse y celebrar. Más aún, es de gran ilusión cuando se tiene un recién nacido en casa y se pasará la primera navidad a su lado.
La llegada de un hijo (a) es un hecho maravilloso y único, pero es complejo, más aun si hablamos de sobrevivir las festividades con un recién nacido o un bebé pequeño. Es la unión de una época maravillosa llena de personas, con el periodo, también único, de adaptación y privacidad que necesita una familia con su bebé. Mamá y su bebé (papá también pero en menor escala) están sufriendo una serie de cambios que demandan mucho cansancio emocional y físico, aunque se suele dejar de lado el primero cuando en realidad hay que prestarle mucha atención.
La mamá y el recién nacido requieren cuidados especiales que a veces no parecen muy compatibles con estos días. Probablemente el médico y el pediatra ya han dado una serie de lineamientos y cuidados para ambos, lo que sumado a las posibles sugerencias de personas cercanas, puede generar angustia en mamá.
Y es que en el post parto hay una serie de cambios físicos, químicos, psicológicos y sociales que hacen a la mamá más vulnerable a variaciones de estado de ánimo. Por este motivo, muchas mujeres (70-80%) pueden llegar a sentir “tristeza post parto”. Este es un periodo común en que la mamá se siente débil, sola, abrumada, angustiada, cansada, irritable, vulnerable, con momentos de llanto y tristeza, entre otros. Eso sí, a diferencia de la depresión post parto, la mujer puede seguir funcionando en este periodo transitorio del que con apoyo emocional puede salir fácilmente.
El apoyo para la madre es fundamental, sobre todo en una época tan emotiva como la Navidad, más aun por ser la primera navidad con tu bebé; por lo que una buena manera de ayudar puede ser algo tan sencillo como entender y respetar el proceso de recuperación y acomodo de la familia. Se trata de comprender que esto es un “proceso” en el que mamá va aprendiendo paulatinamente a conocer a su bebé y, al mismo tiempo, lidia con todos los cambios.
¿Y entonces qué hacer?
Mamá
Primero que nada, tómese un momento y respire profundo. Confíe en sus instintos, en su voz interna. Usted está viviendo un momento maravilloso, la primera navidad con tu bebé, se ha embarcado en una bella aventura que requiere un nuevo enfoque, canalizar su energía de manera diferente y reorganizar sus prioridades. Usted es una mujer bella y fuerte, compréndase, ámese y dese cuenta que usted es la mejor mamá que su bebé puede tener. Usted es “la mamá”, y como cualquier ser humano, es imperfecta y en continuo aprendizaje.
Si cree que necesita ayuda, pídala. Si tomó una decisión y esta no le da paz, analícela de nuevo, probablemente deba replanteársela. Escuche los consejos pero no ceda a la presión social, usted es quien sabe lo que es mejor para su bebé y para usted. Apóyese en su pareja, sea clara en decirle lo que necesita y de qué manera le puede ayudar, no espere que adivine sus pensamientos. Este es un periodo en el que usted necesita privacidad, si prefiere quedarse en casa para Navidad, hágalo. Si desea que la visiten, solicite que lleven la comida o que le apoyen en la organización, usted claramente no puede encargarse de esto, o bien, puede generarle una carga y un cansancio innecesarios en este momento.
Si prefiere celebrar la primera navidad con tu bebé en casa de un amigo o familiar, procure que en el lugar haya un espacio al que usted se pueda retirar a un momento de privacidad en caso de ser requerido. De antemano, avise que es posible que se deba retirar temprano, y no se sienta mal si necesita hacerlo.
Escuche su cuerpo, sus emociones, haga lo que le brinde más comodidad a usted, a su bebé y a su pareja. Puede ser que salir le haga bien si es que necesita despejarse, sin embargo, esto debe ser una elección. Disfrute de esta época y trate de simplificarse.
Papá
Usted está viviendo muchos sentimientos encontrados, la emoción de haberse convertido en padre, los miedos de saber si logrará hacerlo bien, la incertidumbre del proceso de recuperación de su pareja, los comentarios externos, las presiones sociales, la incomprensión laboral, su deseo de ejercer bien su paternidad y la emoción de la primera navidad con tu bebé. Es posible, que existan momentos en lo que se sienta como un espectador, sin saber qué hacer, o cómo apoyar.
Al igual que mamá, respire profundo. Tenga plena confianza en que su rol con mamá y el bebé es importantísimo. Trace una línea imaginaria con la que por medio de la amabilidad pero con firmeza pueda establecer límites de privacidad para usted, mamá y bebé. Hágase dueño y parte de este proceso. Sumérjase completamente en su nuevo rol, tome vacaciones o permiso en el trabajo, acurrúquese con mamá y bebé cada vez que pueda, sea papá canguro, haga masaje o cariño a mamá mientras amamanta. Recuerde que, con excepción de amamantar, usted puede hacer prácticamente todo. Abrace mucho a su pareja y escúchela, intente ser todo lo paciente que pueda, compártale sus sentimientos y disfrute mucho esta etapa.
Ustedes requieren espacio y tiempo. En este periodo en el que mamá está más vulnerable, procure pedir ayuda, recuérdele no preocuparse por la casa y la organización de los eventos. Conversen juntos y decidan si pasar estas épocas en casa o ir a un lugar fuera es lo mejor para ustedes. Para que la primera navidad con tu bebé no sea caótica valoren aspectos como ruido, humo, cantidad de personas en los lugares y cualquier otro factor que se pueda convertir en estresante. Si ve que mamá esta angustiada por la cantidad de gente alrededor del bebé, o porque él está claramente irritado, entre usted en escena, ayúdale a mamá a manejar la situación, apártense un momento a solas y decidan cómo manejarlo. Es importante que antes de recibir personas o visitar a alguien, establezcan los límites que quieren ponerle a los demás. Ustedes son un equipo ahora.
Dra. Sofía Torres, Psicóloga, especialista en Mujer y Familia